RESUMO
La pandemia de síndrome metabólico, obesidad y diabetes mellitus tipo 2 es uno de los mayores retos para los próximos años, así como para reducir la carga de enfermedades cardiovasculares. La iniciativa R3i (iniciativa para la Reducción del Riesgo Residual) ha señalado previamente que la dislipidemia aterogénica es un importante y modificable componente del riesgo residual de origen lipídico. La dislipidemia aterogénica se define como un disbalance entre las lipoproteínas aterogénicas ricas en triglicéridos, que contienen apoB, y las antiaterogéenicas, que contienen apoAI. Para mejorar el manejo clínico de la dislipidemia aterogénica, y con independencia de las modificaciones del estilo de vida, la intervención farmacológica con fibratos es la mejor opción de cara a combinar con una estatina y provocar una reducción del colesterol no-HDL
Pandemics of metabolic síndrome, obesity, and type 2 diabetes is a major challenge for the next years and supported the grat burden of cardiovascular diseases. The R3i (Residual Risk Reduction initiative) has previously highlighted atherogenic dyslipidaemia as an important and modifiable contributor to the lipid related residual cardiovascular risk. Atherogenic dyslipidaemia is defined as an imbalance between proatherogenic triglycerides-rich apoB-containing lipoproteins and antiatherogenic AI containing lipoproteins. To improve clinical management of atherogenic dyslipidaemia a despite of lifestyle intervention includes pharmacological approach, and fibrates is the main option for combination with a statin to further reduce non-HDL cholesterol